La construcción de la fortaleza la empezó Andrzej Tęczyński a mitad del s. XIV. Las murallas periféricas, junto con las atalayas, formaban una planta oval y la entrada pasaba por una fuerte y cuadrada torre-puerta. Esta torre, cubierta con el tejado a cuatro aguas, es la parte mejor conservada del castillo. Hacia 1570 la fortaleza medieval fue transformada en una residencia renacentista con los pórticos de arcadas en el patio y con las murallas coronadas por los decorativos áticos. A principios del s. XVII se ampliaron las fortificaciones del castillo y de este modo se creó una enorme fortaleza baluarte con la impresionante barbacana, conservada hasta el día de hoy. Así se formó uno de los mayores castillos de Małopolska y el más grande en el Altiplano de Cracovia y Częstochowa. Después de la familia de los Tęczyńscy, el castillo lo dominaron los Opalińscy y luego el linaje de los Lubomirscy quienes renovaron el castillo de Tenczyn después de las destrucciones de los tiempos de la invasión sueca. Después del incendio en 1768, el castillo fue abandonado y cayó en ruinas.